Ventajas de los brackets de baja fricción
Ya sabes que, además de poner a tu disposición al mejor implantólogo, contamos con grandes expertos en ortodoncia. Lo que nos interesa en este post es saber si conoces las ventajas de los brackets de baja fricción para este tipo de tratamientos correctores.
Hace unos años, únicamente existían los tradicionales e incómodos brackets metálicos. Sin embargo, actualmente podemos optar por otros métodos no solamente más cómodos y respetuosos con la estética dental, sino que además nos ofrecen unos resultados eficaces en menor tiempo. Uno de los ejemplos más representativos de brackets de baja fricción es el Sistema Damon o Tip Edge. Su principal particularidad es que las fuerzas utilizadas en esta técnica son suaves y por ello se obtiene una mayor comodidad y rapidez en el proceso. De este modo, la principal ventaja de esta técnica es que se consigue el movimiento dentario de forma más rápida en comparación con los brackets convencionales. Esto se debe a un sistema de fuerzas más eficiente y fisiológico.
MÁS MOVIMIENTO DE LAS PIEZAS DENTALES
Otra ventaja de los brackets de baja fricción que podemos colocar en la clínica del doctor Martínez Barcenilla. Se trata de la mayor capacidad de movimiento de las piezas dentales, un aspecto muy positivo porque podremos evitar la extracción de piezas dentales, algo que era muy habitual en el tradicional.
Finalmente, cabe mencionar otra de las ventajas clave: la comodidad. En este sentido, es necesario recordar que uno de los principales problemas de la ortodoncia convencional eran las molestias durante el tratamiento. Por ello se diseñó esta nueva variedad de brackets que hacen uso de un sistema de fuerzas ligeras. Estas evitan, en gran parte, las molestias durante el proceso, siendo una de las ventajas que más agradecen aquellos pacientes que optan por este método a la hora de corregir cualquier problema relacionado con la desalineación dental.
En resumen, los brackets de baja fricción son aparatos de ortodoncia de última generación que incorporan una nueva técnica que supone un salto exponencial respecto a los brackets convencionales. Estos brackets de baja fricción no necesitan gomas ni ligaduras para agarrar el arco del aparato. Gracias a su sistema de agarre, existe una fricción menor entre el bracket y el arco del aparato.