¿Brackets o Invisalign?
Las diferentes técnicas de ortodoncia estética o invisible han provocado que muchos pacientes adultos y adolescentes se acerquen a la ortodoncia y acepten alinear su dentición. El paciente que sólo se deja tratar con técnicas “invisibles” se puede beneficiar en la actualidad de diferentes técnicas que tienen una efectividad prácticamente igual a la de la ortodoncia con brackets convencional.
Vamos a revisar algunas de las técnicas que existen para hacer que “no se vea” que el paciente lleva aparato.
Podemos clasificar las técnicas invisibles en ortodoncia:
- Técnica lingual, sistema Incógnito y similares, o brackets transparentes por vestibular. (sistemas con brackets)
- Técnica Invisalign, y similares, que son sistemas de alineadores transparentes.
Vamos a repasar brevemente estas técnicas:
1. LA ORTODONCIA LINGUAL:
Llevan existiendo desde principio de la década de los 70s, cuando dos clínicos comenzaron a trabajar en el desarrollo del método. Al principio se pusieron brackets transparente de plástico por lingual. Pero cayeron en desuso con los nuevos adhesivos y materiales cerámicos para brackets en vestibular.
Son técnicas muy complejas y difíciles de cementar, así como incómodas.
Precisan de un control clínico muy estricto para conseguir un resultado óptimo, y que no es fácil de conseguir. La importancia de la posición es fundamental, y aunque las técnicas han mejorado considerablemente, siguen suponiendo un reto. También cabe destacar, sobre todo en la arcada inferior, el perfil de los brackets que actuando como “irritante” de la lengua en pacientes especialmente sensibles se hace insoportable.
Son brackets basados algunos de ellos en sistema de CAD CAM que individualiza los brackets a cada diente, y la conformación de arcos de alambre para cada paciente en concreto, según la anatomía de la superficie lingual de sus dientes.
Todo el proceso es informatizado y guiado para minimizar al máximo los errores clínicos. Esto encarece mucho la técnica.
Respecto a los brackets transparentes, cerámicos, plásticos, zafiro, …cuando un paciente acude a una clínica dental con intención de realizarse un tratamiento de ortodoncia, es habitual que llegue planteando una duda, ¿qué tipos de brackets hay? ¿y cuáles son los mejores? No hay respuesta con verdades absolutas. Y eso es lo primero que deben conocer los pacientes. Para cada uno de ellos será mejor la utilización de uno u otro tipo de brackets atendiendo a diferentes criterios.
Como profesional es recomendable que dispongamos de todos los tipos de brackets para satisfacer las necesidades y gustos de nuestros pacientes. Cada paciente es un mundo. Es importante que conocer las ventajas e inconvenientes para ofrecer varias opciones de brackets.
Respecto a los brackets de Zafiro, sus principales ventajas son su aspecto estético, su durabilidad y su funcionalidad, que muestran gran superioridad respecto a otras opciones. Es la opción preferida por muchos pacientes que los conocen como brackets invisibles. Por contra, su precio claramente más elevado que otras alternativas, es un gran desventaja pues no es apto para todos los bolsillos.
Los brackets cerámicos, son muy duraderos y efectivos. Además cuentan con la gran ventaja de ser estéticamente muy interesantes. Todo ello con un rango de precios asequibles aunque más elevado que los metálicos, esto hace que sean una opción cada vez más utilizada.
En cuanto a los brackets de resina, de policarbonato y de plástico, Cuentan con más inconvenientes que ventajas. En principio muestran buena estética pero se va perdiendo con los meses de uso. Y se quiebran con facilidad con las molestias que ello supone. Pero económicamente son interesantes para muchas personas.
Cada paciente valora en mayor o menor medida varios aspectos en este tipo de tratamiento. Según cada uno de ellos es aconsejable el uso de diferentes tipos de brackets.
Sin duda alguna, teniendo únicamente en cuenta la estética, los mejores brackets son los brackets transparentes de zafiro. No se manchan con los alimentos y su transparencia favorece la estética de la sonrisa. De igual modo los brackets cerámicos no se manchan con los alimentos y visiblemente resultan muy apropiados.
En un segundo lugar se sitúan los backets de composite, los de policarbonato y los de plástico. Pasados unos meses de uso cambian de tonalidad debido a la alimentación. Aunque su aspecto decaiga con el tiempo puede ser una buena opción estética si también es importante tener cuenta el precio.
Desde el punto de vista estético los brackets metálicos son los menos adecuados sea cual sea su tamaño en cualquier tipo de ortodoncia.
En cuanto a su capacidad de adhesión, teniendo en cuenta este aspecto los brackets metálicos son los mejores. Resisten mucho mejor que los brackets cerámicos la fuerza ejercida durante la masticación. En ocasiones es aconsejable colocar brackets metálicos en los premolares inferiores combinados con brackets cerámicos en las restantes piezas dentales para evitar el desgaste de las piezas superiores durante la masticación.
Así también habrá que destacar los brackets metálicos por su higiene sencilla y su interesante precio. Los brackets cerámicos tienen un precio algo superior a los metálicos pero siguen siendo asequibles. Mientras, los brackets de zafiro son los menos interesantes si nos atenemos a su precio. Pero suplen esta desventaja con las claras ventajas que ofrecen en otros aspectos.
ALINEADORES TRANSPARENTES, INVISALIGN
Los alineadores removibles transparentes se han ganado, incuestionablemente, un lugar de importancia capital en la ortodoncia estética/invisible actual.
Se basan en la ortodoncia elástica. La idea de utilizar aparatos elásticos confeccionados sobre un modelo corregido del paciente y usarlos de forma seria da data del 1945.
Desde el año 1997 se han empezado a desarrollar técnicas transparentes más modernas entre las que destaca Invisalign, que se basa en una secuencia de alineadores en un programa informático que utiliza tecnología en tres dimensiones. Este programa se llama ClinCheck .
Habiendo utilizado algunas de las técnicas disponibles en este sentido, hay que reconocer que Invisalign sigue ofreciendo ventajas con respecto a muchas de las otras, en concreto dos.
La primera es precisamente el programa ClinCheck, que aparte de ofrecer una previsión bastante fidedigna de lo que puede suceder durante el tratamiento, permite actuar en forma de set up virtual que puede modificarse cuantas veces se quiera para obtener una visualización del tratamiento en diferentes escenarios, como extracción de premolares vs extracción de incisivos inferior, vs no extracción,…
Y la segunda son las continuas investigaciones y mejoras que propone cada año para que los resultados clínicos cada vez sean más predecibles.
Los más reciente desde el punto de vista de aplicación clínica se podría considerar que es el Invisalign Teen ( para adolescentes y preadolescentes desde los 11 años de edad, incluyendo indicadores de cooperación azules que se vuelven transparentes si el niño lleva los aparatos el número idóneo de horas), el Invisalign Lite ( para casos poco complejos que requieren poco movimiento) y los procedimientos clínicos mejorados (enhanced clinical procedures), que incluyen:
Forma de attachment mejorada ( composites pegados al diente para agilizar movimientos).
Optimización en la velocidad, hasta que este año, ya incluyen en ClinCheck la inclinación no sólo de la corona sino también de la raíz.
La nueva técnica Invisalign y algunas similares están, indicadas, en casos en que se precise alineación dentaria y preocupe la estética general durante el tratamiento, con la ventaja de que hay que sacarse los alineadores de la boca para cepillarse los dientes y para comer.
Son técnicas que también pueden indicarse en algunos casos de enfermedad de la articulación temporomandibular, o en casos que precisan ortodoncia pero presentan un esmalte muy deteriorado que dificulta la adhesión de los brackets tradicionales (como casos de fluorosis, lesiones por ácido u otras alteraciones).
Los alineadores transparentes como Invisalign por supuesto tienen un coste mucho más elevado que cualquier técnica de brackets utilizada, por su componente estético, y su gran digitalización e investigación que hay detrás de todos ellos.